Observatorio Política Brasileña

Miradas al Sur

Miradas al Sur
http://sur.elargentino.com

sábado, 30 de abril de 2011

Un tablero político a favor de Rousseff

Un tablero político a favor de Rousseff


Año 3. Edición número 154. Sábado 30 de abril de 2011

Dilma Rousseff va dejando a Lula en un plano cada vez más alejado del poder. (AP)
La oposición se desgrana y Dilma consolida su gestión
El escenario político brasileño se mueve a favor de Dilma Rousseff. Mientras reafirma su relación con el PT, la oposición no logra articularse y se fragmenta. En ese marco, avanza con su política nacional e internacional dejando a Ignacio Lula Da Silva en un plano muy alejado del poder. De hecho, en el 8º Congreso Nacional de los Metalúrgicos de la CUT, el ex mandatario dio total apoyo a la presidenta, sostuvo que los medios intentan crear diferencias, “no existen divergencias, porque el día que discordemos, ella tendrá la razón” enfatizó Lula .
Se suma el apoyo que dará el Partido dos Trabalhadores, que desde ayer y hasta esta tarde, su Directorio Nacional está reunido en Brasilia para discutir la coyuntura del país. Tienen previsto analizar una propuesta de reforma política y lineamientos hacia las elecciones municipales de 2012. Y aunque el pedido de reincorporación de Delúbio Soares, quién se había alejado del partido por las acusaciones de desvíos de fondos para la “Mensualidad” a los legisladores, será un tema escabroso; habría consenso de aprobarlo por no haberse encontrado ninguna responsabilidad judicial.
Además, deberán designar el reemplazo de José Eduardo Dutra, licenciado desde marzo por salud y que ahora presentó su renuncia. La Comisión Ejecutiva acordó proponer a Rui Falcao, actual presidente interino, con el apoyo de Construyendo un Nuevo Brasil (CNB), PT de Luchas y Masas y Nuevos Rumbos, corrientes que juntas representan el 56% de la conducción nacional. La propuesta de Rui Falcao ganó fuerza luego que el Senador Humberto Costa (PT-PE), presidente de la bancada petista, desistiera de pretender ocupar el cargo. Además cuenta con el apoyo tanto de Dilma Rousseff como de Ignacio Lula Da Silva. Desde Brasilia, Raúl Pont, miembro del Directorio Nacional del PT, comentó a Miradas al Sur que: “no habrá cambios en la relación con Dilma y encontramos un momento propicio para avanzar en temas como Reforma Política”.
A contrapartida, la oposición se desgrana. Tanto el Partido Socialdemócrata do Brasil como los Demócratas (ex Partido Federal Liberal) pierden gobernadores y parlamentarios. En el PSDB, la disputa entre José Serra, ex candidato a presidente, y el senador Aecio Neves, exgobernador de Minas Gerais, provoca fuertes tensiones que les está generando la fuga de referentes locales de cara a las municipales de 2012. En tanto que los DEM han sufrido una fractura significativa con el alejamiento de Gilberto Kassab, actual alcalde de San Pablo, que al crear una nueva organización, el PSD (Partido Social Democrático), de cuño desarrollista, se llevó 13 diputados y una senadora a un juego de oposición con apoyo crítico al gobierno.
Ante esta situación, el fundador del PSDB, el expresidente Fernando Henrique Cardoso, alentó a formar un solo partido con los DEM. Lo que fue respaldado por algunos analistas como el sociólogo tucano Bolívar Lamounier, quien afirmó que “la oposición pasa por una debilidad. Es preciso reagrupar fuerzas. Cualquier movimiento en ese sentido es bueno”. Sin embargo, esta propuesta fue desestimada por el actual presidente de los DEM, el senador Agripino Maia, quien garantizó que “la tesis de una fusión no está al orden del día”. Incluso el expresidente demócrata, Rodrigo Viana, twitteó: “Propuesta de fusión. Sólo es buena para el gobierno”. Y si bien sería una estrategia de supervivencia, hay puntos, tanto ideológicos como programáticos, e intereses parroquiales que confrontan fuertemente entre ambos partidos.
Con este panorama, mientras el PT traza nuevos movimientos y la oposición de desgrana, Dilma Rousseff fortalece su gobierno y consolida su gestión. En el plano interno, impulsa inversiones fuertes en programas de educación técnica y superior, incluso, prevé invertir unos U$S 200 millones en formación de profesionales de turismo para el Mundial y las Olimpiadas. A su vez, tras su viaje a China, la presidenta prepara en su agenda una serie de al menos ocho visitas diplomáticas, que van desde los vecinos del MERCOSUR (Paraguay y Uruguay) hasta Bulgaria, tierra de su padre. Los acuerdos comerciales pretenden colocar productos brasileños sosteniendo precios que no impacten a nivel interno con una presión inflacionaria al tipo de cambio.



Promedio: 5 (1 voto)
Seguinos en Twitter


domingo, 17 de abril de 2011

Dilma Rousseff, China y los BRICS

http://sur.elargentino.com/notas/dilma-rousseff-china-y-el-brics

Dilma Rousseff, China y el Brics

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, realizó su tercer viaje internacional. Esta vez, el destino fue China, los anteriores habían sido Argentina y Portugal. Estuvo acompañada por los Ministros Antonio Patriota (Relaciones Exteriores), Fernando Pimentel (Desarrollo, Industria y Comercio), Aloizio Mercadante (Ciencia y Tecnología) y Edison Lobao (Minas y Energía); además del gobernador de Bahía, Jaques Wagner, y una comitiva de unos 250 empresarios. Este despliegue buscó centralmente redefinir el intercambio comercial; fijar acuerdos de política internacional y profundizar las bases del Bric, que ahora suma la S de Sudáfrica.
Este dato no es menor, porque el Brics (integrado por Brasil, Rusia, India, China y, a partir de este encuentro, Sudáfrica), representa el 40% de la población mundial y suma cinco países cuyo producto bruto combinado alcanza un 18% del producto global, frente al 21% de los Estados Unidos. En este bloque, siendo la octava potencia económica mundial, Brasil es la segunda economía en importancia, detrás de China y delante de la India, tomando un rol protagónico en el escenario internacional.
La primera etapa del viaje se orientó a redefinir la relación comercial con China. "Reciprocidad" fue como definió la mandataria brasileña este objetivo. Y que si bien ambos países tienen un intercambio comercial de unos 45 mil millones de dólares, siendo incluso más alta que la relación con los Estados Unidos, preocupa al gobierno de Rousseff, presionado por sus productores internos, el déficit de U$S 5 mil millones que lo atribuyen al juego cruzado de apreciación del Real y desvalorización del Yuan y el Renminbí, generando una competitividad desleal. Si bien la política monetaria no se puso en cuestión, se alcanzaron acuerdos de inversiones estratégicas, como aviones o informática, tal como pedían sectores industriales brasileños. Es que a la fecha, Brasil exporta a China productos básicos, como mineral de hierro, soja y petróleo; en tanto que importa productos manufacturados del gigante asiático.
En el marco de las relaciones internacionales, es sabido que un punto importante para la política internacional de Brasil es el asiento en el Consejo Permanente de Seguridad en la ONU, lugar que reclama. Esta aspiración no tuvo eco durante la visita de Barack Obama hace un mes, más allá de que Estados Unidos estaría de acuerdo en una reforma del organismo. Esta vez, Dilma Rousseff obtuvo una declaración que si bien no es un apoyo explícito, ya que China tiene dificultades con algunos de los candidatos a ocupar ese lugar (como Japón), afirma "comprender y apoyar" la aspiración brasileña de desempeñar ese papel en las Naciones Unidas.
Como corolario del viaje, Dilma Rousseff participó de la III Reunión de Líderes del Grupo Brics y la reunión anual del Foro Boao para Asia (Considerado el Davos asiático), que se celebró en la provincia insular de Sanya, en el sur del país. Junto al chino Hu Jintao, el ruso Dimitri Medvedev, el indio Manmohan Singh y el incorporado sudafricano Jacob Zuma, fijaron un "Plan de acción", para consolidar el funcionamiento organizativo del Brics, especialmente en términos de cooperación. Además, firmaron la "Declaración de Sanya", un documento de 32 puntos, en el que impulsarán, entre otras cosas, una regulación más firme de los derivados de materias prima, para controlar la excesiva volatilidad de los precios de los alimentos y la energía que, según dijeron, representan una amenaza para la recuperación mundial.
Otro eje central es que el Brics reclama la reforma del sistema financiero internacional. Representando el 40% de las reservas de divisas del mundo, les preocupa la insuficiencia del actual orden monetario, especialmente por el descuido de Estados Unidos como emisor de la principal divisa. Si bien el objetivo no es nuevo, el hecho relevante es que la declaración se realizó horas antes de un encuentro en Washington de los ministros de finanzas del Grupo de las Siete naciones industrializadas (G7), mostrando la confianza cada vez mayor de los mercados emergentes.
A su vez, en el plano de la política internacional, los países Brics apoyan la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, desde perspectivas diferentes pero con el fuerte compromiso de propiciar la multilateralidad. En ese marco, Dilma Rousseff afirmó: "El uso de la fuerza no puede ser precipitado y la diplomacia y la negociación deben ser priorizados" por la ONU. Así, condenaron los ataques aéreos a Libia realizados por la Otan y urgieron a una inmediata solución diplomática, colocando al Brics en un rol importante por nuevo orden mundial.



Promedio: 5 (2 votos)
Seguinos en Twitter

Otras notas

  • La semana que viene, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, visitará Brasil acompañado de la primera dama Michelle y de sus hijas, Saha y Malia. Estará el 19 en Brasilia y el 20 en Río de Janeiro, con una programación aún no confirmada pero que prevé la visita a la favela "pacificada", un chapuzón en una playa carioca y una cena íntima con Dilma Rousseff.
  • Los primeros cien días de gestión resultan clave para definir el rumbo de un gobierno. Y a pesar de la difícil tarea de eclipsar la popularidad de Ignacio Lula da Silva, la gestión de Dilma Rousseff pareciese haber logrado un perfil propio en la conducción de la colosal estructura administrativa brasileña. La era Dilma comenzó con un verano movido, por las inundaciones en Río de Janeiro, y parece no encontrar descanso con la matanza a niños indefensos en una escuela de esa ciudad.
  • La presidenta brasileña Dilma Rousseff cumplió su primer viaje internacional. Y con una agenda de unas cinco horas, reafirmó el nuevo vínculo en la relación bilateral que establecieron ambos países a partir del eje que marcaron Inácio Lula da Silva y Néstor Kirchner, junto a Hugo Chavéz, de contraposición al Alca que impulsaba el ex presidente de los Estados Unidos, George W. Bush. En este encuentro con la mandataria argentina Cristina Fernández, con sólo seguir la crónica de la visita de Dilma al país, se puede comprender la nueva etapa en la integración binacional y regional.
  • El diario Clarín destacaba en su edición del 2 de enero pasado que la presidenta de Brasil Dilma Rousseff no había citado a la Argentina en su discurso de asunción. En menos de 24 horas, se esfumó ese intento de buscar discordias bilaterales, cuando los cancilleres de ambos países anunciaron que la mandataria brasileña fijaba a Buenos Aires como primera visita internacional. Este offside periodístico elude los condicionamientos estructurales que tienen ambos países, tanto históricos como coyunturales, que los relaciona en forma estratégica y preponderante.
  • La cumbre de la Otan en Lisboa, del 19 de noviembre pasado, concluyó con un comunicado repleto de buenas intenciones. Sin embargo, la reunión mostró que el objetivo de la Alianza Atlántica sigue siendo el de proceder con la reorganización de sus fuerzas nucleares. Un informe muestra que Estados Unidos mantiene armas nucleares en cuatro países europeos de la Otan –Italia, Bélgica, Alemania y Holanda, violando, de esta manera, el tratado de no Proliferación.
  • Casi como una metamorfosis kafkiana, devino la mariposa y Brasil ahora comienza a volar con belleza femenina. Aquella joven guerrillera, que padeció la tortura de una dictadura asesina, con el esfuerzo de haberse recibido de economista y haber mostrado su capacidad en la gestión pública, llega a la presidencia luego de haber enfrentado su primera contienda electoral. La flamante presidenta Dilma Rousseff tiene el reto de marcar su impronta en un nuevo gobierno.

domingo, 10 de abril de 2011

Los primeros 100 días de la era Dilma en Brasil

http://sur.elargentino.com/notas/los-primeros-100-dias-de-la-era-dilma-en-brasil

Los primeros 100 días de la era Dilma en Brasil

Año 3. Edición número 151. Domingo 10 de abril de 2011

Durante su gira presidencial en Portugal, Rousseff ratificó que su gestión no es un calco respecto a la de Lula. (AP)

Con tres meses de gobierno, la nueva presidenta logró un perfil propio en la conducción de la colosal estructura administrativa brasileña

Los primeros cien días de gestión resultan clave para definir el rumbo de un gobierno. Y a pesar de la difícil tarea de eclipsar la popularidad de Ignacio Lula da Silva, la gestión de Dilma Rousseff pareciese haber logrado un perfil propio en la conducción de la colosal estructura administrativa brasileña. La era Dilma comenzó con un verano movido, por las inundaciones en Río de Janeiro, y parece no encontrar descanso con la matanza a niños indefensos en una escuela de esa ciudad. En esas adversidades, mostró una alta capacidad de gestión, que fortalece su impronta iniciada con el cambio en la composición de género en el gabinete, la reorganización del funcionamiento del Ejecutivo y la relación con los niveles subnacionales, recibiendo halagos de gobernadores y prefeitos, incluso opositores.
A su vez, Dilma pudo desterrar la idea que presentaba a Lula como un poder en las sombras. Tuvo la capacidad de dirigir la coalición de gobierno, mostrándose inflexible ante hechos de corrupción, que involucraban al Pmdb, o sosteniendo posiciones como el salario mínimo, que la enfrentaba al PDT. A pesar de esto, tuvo a un disciplinado Pmdb, casi como partido de Estado, en cambio, se evidenciaron algunas fisuras en el PT. A contrapartida, provocó la desarticulación de la oposición, moderando a Aecio Neves, hoy principal referente del Psdb, y la ruptura de los Demócratas (ex PFL), donde el prefeito de San Pablo, Gilberto Kassab y la senadora Kátia Abreu, se proponen reorganizar el Partido Social Demócratico de Juscelino Kubitschek.
Sin embargo, el énfasis en los DDHH es el principal eje del nuevo gobierno, algo que genera profundos cambios en política interior y exterior. Esta mujer, guerrillera marxista que padeció la represión y tortura de la dictadura (1964-1985), no podía soslayar su pasado. Brasil pasa de la política del autoindulto y olvido al de la memoria, verdad y justicia. A partir de incorporar tratados internacionales, como la aprobación por parte del Senado de la Convención Interamericana sobre Desaparecidos, los delitos de la dictadura se encuadran en la figura de lesa humanidad, por lo que la Justicia avanzará sobre sus acciones.
A tal fin, el gobierno de Dilma impulsa la formación de una Comisión de la Verdad, que debe aprobar el parlamento. Como afirmó a Miradas al Sur, María do Rosario Nunes (Secretaria de DDHH de Brasil), “el objetivo no es el revanchismo o la venganza, sino el esclarecimiento. Es bueno para la democracia que la democracia sea absolutamente transparente”. Desde los sectores militares, la reacción va desde el enfrentamiento hasta la búsqueda de conciliación. Algunos ex miembros formaron el Partido Militar Brasileño, para rechazar esta nueva polítca. En cambio, la semana pasada, las Fuerzas Armadas entregaron a Dilma un galardón, para tratar de bajar la tensión con la mandataria.
Así como la Rede O Globo producía novelas durante la dictadura, para difundir una “identidad” brasileña, un dato interesante es el estreno, en horario central, de Amor y revolución que realizó la televisora STB. Una historia que evoca a Dilma y se desarrolla en pleno período militar, tras el golpe contra Joao Goulart en 1964. Incluso, en su primer capítulo se denuncia la participación de los Estados Unidos en el hecho. Según la misma María do Rosario Nunes: “La historia hará una contribución importante a la concientización de la política de DDHH en Brasil”.
Desde la visita a Argentina, donde se entrevistó con Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, hasta el voto contra Irán en la ONU, Dilma incorpora la temática de DDHH en su agenda internacional y se diferencia de su antecesor, que ponía énfasis en temas sociales. Así, Marco Aurelio García, quien fuera asesor de Lula y que conserva ese rol en el gobierno, afirmó al diario O Estado de Sao Paulo que: “Esos cambios son determinados no sólo por las alteraciones de la realidad internacional sino por la diferente percepción que la presidenta tiene en relación al mundo”.
Este cambio tiene sus consecuencias en el plano de las relaciones internacionales. Si bien la embajadora María Nazareth Farani Azevedo, representante brasileña en el Consejo de DDHH de la ONU, negó un acuerdo con Estados Unidos por la silla en el Consejo de Seguridad de ese organismo, lo cierto es que esta posición acerca a Brasil a ese país, especialmente en la política sobre Medio Oriente. Incluso, no es casual que Obama ordene atacar a Libia desde suelo brasileño. Y un dato importante es que las reservas petroleras del PreSalt pasan a ser tentadoras para la potencia del norte, lo podría generar un nuevo eje en la relación comercial entre ambos países.
Esta reorientación replantea vínculos con sus socios actuales, algo que estará en agenda en los próximos viajes de Dilma. La mandataria visitará China entre el 13 y 15 de abril, para participar de una cumbre del Bric (espacio que comparte con Rusia, India, China y ahora Sudáfrica) y Venezuela, donde se entrevistaría con Hugo Chávez, el 10 de mayo próximo. Por lo que el gobierno de Dilma Rousseff llega a su día 100 con mucho por contar y por hacer.

Promedio: 5 (1 voto)
Seguinos en Twitter

OTRAS NOTAS

  • Casi como una metamorfosis kafkiana, devino la mariposa y Brasil ahora comienza a volar con belleza femenina. Aquella joven guerrillera, que padeció la tortura de una dictadura asesina, con el esfuerzo de haberse recibido de economista y haber mostrado su capacidad en la gestión pública, llega a la presidencia luego de haber enfrentado su primera contienda electoral. La flamante presidenta Dilma Rousseff tiene el reto de marcar su impronta en un nuevo gobierno.
  • Si el carisma y la aceptación masiva de un dirigente político tuviesen carácter tran­sitivo, el mejor ejemplo lo estaría dando por estos días la candidata presidencial brasileña por el Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff.
  • Que a Brasil ahora lo conduce la presidenta Dilma Rousseff se nota desde el estilo de gestión hasta en los lineamientos de la política nacional e internacional. Apenas llegó al Planalto (sede del gobierno), mandó a sacar una Biblia que Lula tenía en el despacho, destacando su laicismo y siendo como una antesala de su forma de administrar.
  • La semana que viene, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, visitará Brasil acompañado de la primera dama Michelle y de sus hijas, Saha y Malia. Estará el 19 en Brasilia y el 20 en Río de Janeiro, con una programación aún no confirmada pero que prevé la visita a la favela “pacificada”, un chapuzón en una playa carioca y una cena íntima con Dilma Rousseff.
  • "Es hora de que una mujer sea presidenta de Brasil”, dijo la candidata del Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, quien continúa su cosecha de voluntades y, como la espuma, no deja de subir en las encuestas.
  • El diario Folha de Sao Paulo logró que el Tribunal Superior Militar brasileño tenga que abrir los archivos de Dilma Rousseff de la dictadura. Algo que el periódico tituló como un logro de toda la ciudadanía. Sin embargo, en realidad esto comenzó como un intento de publicar la historia de la candidata durante el período electoral, y no para favorecerla. Justamente la Folha de Sao Paulo intentó tomar esta historia para descalificar a Dilma y considerarla “terrorista”, cuando el terrorismo de Estado lo comenzaron los militares brasileños en 1964.